jueves, 7 de octubre de 2010

Lester (2 de 2)



Poco a poco el hombre rubio dejó de serlo, su pelo se volvió negro, dentro de mi cabeza, salpicado de canas blancas y tiesas, se echó unos cuantos años más encima, de repente, y ahora tenía un nombre, pero yo no me atrevía a pronunciarlo, ni siquiera me atrevía a pensar en él.


Las edades de Lulú
Almudena Grandes

4 comentarios:

  1. Vaya, vaya. Conrado, mira lo que he encontrado por casualidad:

    http://hosting.monsterfiles.com/show/6376925/220240

    Espero que te guste y a ver si vuelves a salir de tu letargo y nos vuelves a deleitar con tus fotos y tus historias.

    Un besote.

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  2. ¡Vaya, menudo hallazgo! No tenía ni idea de que la imagen perteneciera a un vídeo... Qué cerdaco está hecho el madurito, como a mí me gustan...

    Te agradezco tu aportación así como que te acuerdes de mí. Ojalá pueda volver pronto.

    Un beso

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  3. Soy nuevo por aquí, felicidades por un blog que pienso visitar más a menudo.

    Un saludo!

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  4. Muchas gracias, Iván. ¡Bienvenido!

    Un beso

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