Muchas veces fantaseo con poder mirarte por un agujero para espiarte, para contemplarte en el sueño, para ser testigo de tu intimidad. Debe de ser delicioso disponer de tu cuerpo desnudo, sólo para mí, aunque sepa que me detestas.
Estaría al otro lado de la pared, a cada momento, y siempre con una mano en la polla, acariciándola, pensando que eres tú el que me toca porque deseas mi cuerpo.
Y cuando fueras tú el que se la estuviese pelando, acompasaría mi tirmo al tuyo para que nos corriésemos a la vez.
mmm qué machote, la boca me sabe a semen
ResponderEliminarAugusto