El verano se ha acabado y no me ha dado tiempo a contar ni la mitad de cosas que tenía previstas.
El verano se ha acabado y ya sólo nos queda rememorar las piernas peludas, los pies enfundados en sandalias, los tíos buenorros en pelotas en la playa. Hay que aprovechar los últimos rayos de sol porque el puto otoño ya está aquí, cogido de la mano del jodido frío que nos hace tiritar y que nos quita las ganas de salir a la calle.
Pero no seamos alarmistas, porque en invierno también se pueden encontrar tíos interesantes paseando por la playa.
Y siempre nos quedarán las piscinas cubiertas.
¡Y cómo no!, ¡podemos retomar el gimnasio!
¡Qué bien! Nuestro Conrado ya ha salido del letargo estival y nos vuelve a deleitar con sus historias y con sus fotos.
ResponderEliminarMe alegro de tu vuelta.
Un besote.
No no... mi gimnasio no es de estos :(
ResponderEliminarBandidoso: muchas gracias, amigo. Sabes que me encanta ponérosla dura, cuando lo consigo, claro.
ResponderEliminarUn beso
ConMaduros: no te creo. ¿Quieres decirme que en tu gimnasio no hay madurotes que no usen ropa interior y marquen paquetón?
ResponderEliminar¡Pues tienes que cambiarte de gym!
Un beso
Creo que debería empezar por IR a un gym :P
ResponderEliminarConmaduros: te prefiero con barriguilla, así que mejor no vayas al gym y espía a los yayos desde el ordenador.
ResponderEliminarUn beso
Joooderrr y tanto ire al gimnasio!!!!! quiero ese tiarron encima mio!!!!! XD
ResponderEliminarKepler: te lo recomiendo, ¡no te arrepentirás!
ResponderEliminarUn beso